La emblemática marca deportiva argentina
sigue adelante con la iniciativa dirigida a la remodelación y modernización de
clubes de distintos puntos del país, junto con la donación de materiales para
que sus socios puedan entrenar y participar de las diversas disciplinas
Topper, la empresa de calzado, indumentaria y accesorios ligada al corazón argentino, asegura que cree firmemente en la democratización del deporte. Con este propósito llevó la campaña “Volvamos a los Clubes” al Santa Ana Rugby Club de Tucumán.
Esa iniciativa alienta a los
socios de los clubes a volver a acercarse y a revivir ese orgullo único de
pertenecer y ser parte. El club de barrio es deporte y mucho más, es el lugar
que contiene y educa. Y Topper pretende estar cada día más cerca de ellos.
Santa Ana es una localidad al sur de
Tucumán, con alrededor de 8.000 habitantes. Un paraje olvidado que supo ser, en
otros tiempos, uno de los ingenios azucareros más grandes de Sudamérica. Allí,
cuatro amigos de apenas 15 años, soñaron con dar vida a un club. Hoy, más de
100 chicos y chicas representan a Santa Ana en el torneo de rugby emergente de
Tucumán, un ejemplo de resiliencia, constancia y trabajo duro.
Hasta allí llegó Topper para continuar
con su campaña “Volvamos a los Clubes” a través de la donación de calzado,
indumentaria, máquinas para marcar la cancha, cortar el césped y desmalezar.
Además, aportó protectores, cubre haches, pelotas, redes, una máquina de
práctica para que los chicos perfeccionen el scrum, un pórtico para demarcar la
entrada del club y un mural de la artista local Ana Luz Singh.
“Los clubes más chicos o de barrio son
los que más sufrieron por la Pandemia. Ellos representan un pilar fundamental
en las comunidades para alejar a los chicos de la calle e integrarlos al mundo
del deporte y a sus valores formativos. Por este motivo, nuestro objetivo es
ayudarlos a levantarse, transformándolos en espacios deportivos más atractivos
para captar a los socios y sumar nuevos”, sostuvo Ignacio Piñeyro, gerente de
Marketing de Topper. En referencia a la nueva institución que se sumó a esta
campaña, agregó: “Conocimos esta historia a través de nuestra fábrica de
Aguilares, ubicada muy cerca de Santa Ana. El 40 % de nuestra dotación de
operarios vive en Santa Ana, así que tiene un sentido de pertenencia muy grande
para la marca”.
Por otro lado, Pablo Moreno, presidente
y socio fundador del club, expresó: “Estamos muy agradecidos a Topper por
habernos ayudado a hacer realidad este sueño”. Nicolás Ponce, otro de los
socios de la institución, agregó: “Todos revivieron esta historia y nos
felicitan por lo que hemos hecho y por lo que hacemos por el pueblo”.
Así, la marca deportiva suma al Santa
Ana Rugby Club en una campaña que viene acompañando durante este año a
numerosos clubes a lo largo y ancho del país, como fueron el Sporting B.B. Club
de Alta Gracia, Córdoba; Club Vecinal y Deportivo Defensores de Cervantes en el
barrio de Monte Castro, Buenos Aires; Club Sportivo Servando Bayo de Rosario,
Santa Fe; el Club Atlético Sporting de La Plata y el Club Sportivo Palermo de
San Salvador de Jujuy, Jujuy. Topper colaboró con rings de box profesionales,
skate parks, máquinas de fitness profesionales, reacondicionamiento de canchas
de futbol 5 y básquet, entre otras iniciativas. Porque cuando el corazón manda
y una comunidad trabaja unida, los sueños se hacen realidad.