"GUZMÁN FUE CENTRAL. ÉL RECOGIÓ CUÁLES ERAN LOS OBJETIVOS QUE DEBÍAMOS ALCANZAR Y SE DIO UNA ESTRATEGIA CORRECTA”
El Presidente lo aseguró durante una entrevista con un canal de televisión. Consideró que el arreglo fue producto de "una lógica correcta y y una estrategia adecuada".
El presidente Alberto Fernández afirmó que el
acuerdo con parte de los acreedores externos implicó resolver una "deuda
imposible" en medio de "la mayor crisis económica" y de una
pandemia, permitió recuperar "autonomía de decisión", por lo que
"ahora está despejado el horizonte" y, llamó a los empresarios a
"comprometerse" para desarrollar sus negocios con un mejor escenario.
Al anunciar el relanzamiento del plan Procrear, el mandatario celebró el
acuerdo alcanzado con los principales grupos de acreedores de la deuda pública,
para canjear US$ 66.300 millones de títulos emitidos en el extranjero, y afirmó
que estos tipos de planes se podrán llevar adelante "sin los enormes
condicionantes de la deuda".
"Fue todo tan complejo y difícil, porque el escenario de la pandemia
complicó todo, que nos pareció que teníamos que ponernos firmes y seguir
adelante con nuestra lógica", sostuvo Fernández sobre las negociaciones
llevadas adelante por el ministro de Economía, Martín Guzmán, a quien dijo que
"abrazó" y "rompió la cuarentena" cuando lo recibió en la
Residencia de Olivos.
"Guzmán fue central. Él recogió cuáles eran los objetivos que debíamos
alcanzar y se dio una estrategia correcta. Ése es un enorme mérito suyo.
Trabajamos todo este tiempo muy juntos y así lo vamos a seguir haciendo",
completó sobre el funcionario.
En entrevistas concedidas a C5N y Cenital, el Presidente sostuvo que estará
"eternamente agradecido al papa Francisco por sobre todas las cosas"
porque el Sumo Pontífice "ayudó muchísimo en silencio", al igual que
al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, por su intermediación
ante Larry Fink, del fondo BlackRock.
También le agradeció al Frente de Todos porque no hubo "ningún doblez
interno en esta discusión", por lo que subrayó: "Podemos tener
matices y bienvenidos sean. pero en el fondo no tenemos diferencias. Eso es
importante que lo entendamos todos", insistió.
También consideró "lejos de la verdad" que se intentara
"demonizar" a la vicepresidenta Cristina Fernández como "alguien
que quería el default o no quería el acuerdo".
Al respecto, rememoró: ".En algún momento en que me puse más duro, hubo
dos personas que me dijeron 'mirá el contexto y ablandate un poco'. Una fue
Cristina y otro fue (Roberto) Lavagna", completó.
"Estamos volviendo a entrar al mundo", dijo Fernández, y prosiguió:
"Lo mejor que nos ha pasado como argentinos es que estamos entrando al
mundo dignamente. Nunca fuimos a pelear contra los acreedores, fuimos a
pedirles resolver un problema del que éramos ajenos", enfatizó, y destacó
que "lo que no vamos a pagar en intereses vamos a destinarlo a producción,
desarrollo, generación de empleo, obra pública e infraestructura".
Por otro lado, afirmó que los "últimos dos planes económicos" que
tuvo el país fueron los de los ex ministros de Hacienda del gobierno de
Cambiemos, Alfonso Prat Gay y Nicolás Dujovne.
Sobre Prat Gay reseñó: "el dijo que iba a salir del cepo y la inflación no
se iba a mover, pero llevó el dólar de 9 a 15, 16 (pesos), y ese año terminó
con 40 y pico de puntos de inflación".
En lo que respecta a Dujovne, el Presidente recordó cuando el ex funcionario
"rectificó un presupuesto aprobado una semana antes, donde las metas de
inflación estaban totalmente desvirtuadas".
Por eso, sostuvo: "no hace falta, no es planificar tanto, sino tener claro
los objetivos", y remarcó entonces que importan la "generación de
inversión y trabajo, que eso se exporte lo más que se puede, y que Argentina
necesite cada vez menos importar insumos".
Las "reglas" para alcanzar esas metas son, en orden,
"desendeudarse, acumular reservas, tener un dólar competitivo, recuperar
equilibrio fiscal y que la balanza comercial sea positiva", definió.
"Mi mayor satisfacción es que con el acuerdo logrado con los bonistas y
con el lanzamiento el mismo día casualmente del maravilloso programa que
Cristina creó y que se llamó Procrear, estamos dando un símbolo de lo que la
Argentina debe hacer en el futuro", remarcó el jefe del Estado.
En ese sentido, Fernández subrayó que con el acuerdo con los bonistas se
recuperó "autonomía de decisión y de definir qué país queremos".
El Presidente sostuvo que con el acuerdo alcanzado esta madrugada por el
Ministerio de Economía con los principales grupos de acreedores de la deuda
pública, la Argentina "resolvió una deuda imposible en la mayor crisis
económica que se recuerde y en el medio de una pandemia".
El mandatario destacó que "ahora está despejado el horizonte" y le
pidió a los empresarios que "se comprometan a poner al país de pie",
ya que tienen un "mejor escenario" para proyectar sus negocios.
También, al hablar durante la presentación de una nueva etapa del plan de
viviendas Procrear, el Presidente agregó que "para Argentina significan
37.700 millones de dólares menos" a pagar "en los próximos 10 años"
y si se considera "lo que Argentina se había comprometido a pagar en 5
años, ese alivio es 42.500 millones de dólares".
Fernández afirmó que "esta deuda fue una deuda cuantiosa", que
"abrumó a todos" , que no sabían si serían "capaces de poder
encontrar una respuesta", aunque estaban "seguros de los
límites" que se habían puesto "para alcanzar esa respuesta".
"Les dijimos que íbamos a poner al país de pie y que la deuda no nos iba a
impedir lograr un proceso de desarrollo y contar con los recursos para que ese
desarrollo se vuelque, no a la especulación, sino a la producción y el trabajo,
y lo estamos logrando", afirmó Alberto Fernández sobre el acuerdo
alcanzado con los bonistas.
El jefe de Estado agradeció "a los acreedores, que entendieron que Argentina,
ofertando lo que estaba ofertando, estaba haciendo un enorme esfuerzo".
También agradeció "a los organismos internacionales", a "150
economistas que se sumaron a la propuesta argentina, entre ellos seis premios
Nobel" y a "la comunidad del derecho, donde aparecieron las firmas de
los mejores abogados del mundo diciendo que lo que plantea Argentina es
correcto".
"En estos siete meses nos dijeron que no entendíamos nada y que estábamos
camino al fracaso porque no aceptábamos las ofertas de los acreedores. Resulta
que finalmente cerramos un acuerdo que le permite a la Argentina ahorrarse
33.000 millones de dólares de la deuda asumida en los próximos diez años. Ahora
tenemos despejado el horizonte a donde queremos llegar", sostuvo el
mandatario.
También dijo por Twitter y Facebook que "en política, nada es más
importante que la palabra empeñada. Y creo que estamos cumpliendo con nuestra
palabra y con nuestro objetivo. El acuerdo al que hemos llegado con los
acreedores nos permite recuperar autonomía para empezar a construir el país
queremos".