Un nuevo reclamo de los choferes de taxis contra el avance del servicio de Uber mantiene bloqueado el tránsito alrededor de la plaza Independencia y ocasiona inconvenientes y demoras en los alrededores.
Un grupo de taxistas se movilizó esta mañana desde El Bajo hasta la plaza Independencia. En una marcha autoconvocada, reiteraron sus peticiones debido a la pérdida de ingresos que atribuyen a la falta de regulación de Uber.
El periodista de Los Primeros Álvaro Mejuto entrevistó a uno de los manifestantes. "Se nos está quitando el trabajo. Desde la municipalidad no hay control a Uber, pero sí a los taxis. No nos dejan trabajar. Nos han quitado paradas por los carriles exclusivos."
La columna de manifestantes se encuentra en plaza Independencia y no descartan movilizarse, antes del mediodía, hacia la sede de la municipalidad capitalina en 9 de julio 598.
Los taxistas piden que la intendente Rossana Chalha tome medidas y regularice la actividad de las aplicaciones de viajes. Apuntaron contra la mandataria por falta de apoyo y de permitir que la situación empeore.
Según los choferes, la concurrencia de clientes en taxis ha disminuido en un 70% desde la llegada de Uber, lo que consideran insostenible para su economía. A su vez, expresaron su descontento y catalogaron al servicio de Uber como "competencia desleal".
Soluciones Implementadas en Otros Países
En varias partes del mundo, la llegada de Uber ha generado conflictos similares entre los taxistas y los servicios de transporte basados en aplicaciones. Sin embargo, diferentes gobiernos han encontrado soluciones para regularizar esta situación:
España: En ciudades como Barcelona y Madrid, las autoridades han implementado regulaciones específicas para los servicios de transporte de pasajeros a través de aplicaciones. Estas normativas incluyen la necesidad de licencias especiales y restricciones en la cantidad de vehículos que pueden operar.
Estados Unidos: En ciudades como Nueva York y San Francisco, se han establecido leyes que obligan a Uber y otros servicios similares a cumplir con estándares de seguridad y seguro, así como a pagar tasas que contribuyen al mantenimiento de la infraestructura de transporte.
Reino Unido: En Londres, Uber ha tenido que cumplir con estrictos requisitos de licencia y seguridad para continuar operando. Además, las autoridades locales han impuesto límites a la cantidad de horas que los conductores pueden trabajar para garantizar su bienestar.
Brasil: En Sao Paulo y Río de Janeiro, se han creado marcos regulatorios que incluyen tarifas mínimas y máximas, así como la obligatoriedad de que los conductores estén registrados y capacitados.
Estas medidas han permitido que Uber y los servicios de taxi coexistan de manera más equilibrada, garantizando competencia justa y seguridad para los usuarios.