El presidente del Consudec llamó a los docentes a afrontar la "prevista imprevisibilidad" del año educativo, enseñando a mirar la "positividad" y despertando una "relación más cercana, más humana".
Educación en tiempos de pandemia
El presidente del Consejo Superior de
Educación Católica (Consudec), presbítero José Álvarez, ofreció algunas
consideraciones sobre la tarea que le espera a los docentes al volver a las
aulas en otro ciclo electivo con perspectivas imprevisibles
El sacerdote pidió a los docentes afrontar
esta realidad educativa con actitud positiva, pero no con “una mirada
conformista”, resignada, sino reconociendo que “la realidad que nos toca
enfrentar en las circunstancias cotidianas son un aporte importante en nuestro
camino vocacional”.
“El imprevisto nos enseña que no somos dueños
de la realidad, que no la hacemos nosotros y que ella no responde a nuestro
buen juicio, de ella debemos aprender; que cuando aprendemos nos paramos con
humildad frente a las cosas y hacemos lo que podemos con lo que tenemos”,
sostuvo en su editorial de febrero en la revista institucional.
“Hoy no sabemos si estaremos vacunados para
el comienzo de las clases, si nuestros alumnos estarán libres de contagios, si
habrá nuevas cepas, si se podrá dar clase todos los días y durante cuánto
tiempo, si habrá nuevos rebrotes que nos lleven a una nueva reclusión en los
hogares, pero sí sabemos que estamos aquí haciendo lo posible para transmitir a
nuestros jóvenes lo que llevamos dentro, con la misma pasión, con el mismo
deseo, tendiendo a lo óptimo y haciendo lo posible”, reflexionó.
El presidente del Consudec también hizo
hincapié en un factor nuevo: “Un año en que nos pasaron a nosotros y ellos
muchas cosas, miedos, depresión, cansancio, aburrimiento, fatiga, perdidas de
afectos y materiales, estamos más golpeados, pero con deseos de renacer y
acompañar a otros en este nuevo comenzar, hoy nuestros corazones aprenden a
abrazar con la mirada, con la palabra cálida, con la comprensión”.
“Vamos curiosos hacia una nueva apertura de
un ciclo lectivo que promete dada su prevista imprevisibilidad despertar en
nosotros y nuestros alumnos una relación más cercana, más humana”, concluyó.
Fuente: AICA