Técnicos y pasantes del Ministerio de Desarrollo Productivo estudian las 900 hectáreas del área protegida con gran diversidad en su flora y fauna nativa. Retiraron residuos de espacios comunitarios e informaron a visitantes sobre la importancia de cuidar los márgenes de la Ruta 307.
Tucumán
tiene áreas de gran valor ambiental por su diversa geografía, flora y fauna.
Espacios que prestan un servicio ambiental vital para la región al implicar un
pulmón verde trascendental para la sostenibilidad de los ecosistemas y de la
vida humana. Entre estos territorios, se encuentra la Reserva Provincial Los
Sosa, donde por estos días se realizó una jornada solidaria de limpieza en los
márgenes del río Los Sosa y Ruta Provincial 307 que contó con el apoyo de
personal y pasantes, equipamiento y móviles del Ministerio de Desarrollo
Productivo dependientes de las direcciones de Flora, Fauna Silvestre y Suelos,
Ganadería y Alimentos que se encuentran bajo la órbita de la Secretaría de
Desarrollo Productivo.
El
trabajo en equipo de los agentes fue esencial para desarrollar la actividad que
posibilitó sanear espacios comunes, muy visitados durante la temporada estival
por turistas, buscando promover la conciencia ambiental entre los ciudadanos.
Por
estos meses, el personal relevó distintos puntos del recorrido desde la zona
pedemontana en Santa Lucía hasta el Dique La Angostura, en Tafí del Valle y El
Mollar, donde se colocó cartelería ecológica informativa. La idea es prevenir
la radicación de basurales en la zona que tienen impacto ambiental negativo.
Al
respecto, el ministro de Desarrollo Productivo, Luis Fernández, aseveró: “desde
hace tiempo trabajamos en la recuperación del área protegida que abarca la Ruta
que acompaña el Río Los Sosa. Durante el operativo, se levantó una enorme
cantidad de basura. Por eso invitamos a que los visitantes se lleven consigo
los residuos para cuidar los centros de esparcimiento. Buscamos concientizar a
la comunidad”.
Historia
La Reserva fue creada en el año 1940 y se encuentra ubicada dentro del departamento Monteros, en el corredor turístico más importante de la provincia, la Ruta Provincial N° 307 que conduce a los valles Calchaquíes, entre los kilómetros 20 y 38.
El
secretario de Desarrollo Productivo, Juan Blasco, afirmó: “es una jornada
solidaria que se hace durante el año cada tres meses que consiste en la
limpieza del camino. Hicimos limpieza en zonas de merenderos y repusimos bolsas
en los tachos de basura. En la zona se observa mucho tráfico de personas que se
volcó a visitar los Valles Calchaquíes. Toda la basura recolectada será enviada
al Centro de Reciclado de Tafí Viejo”.
A medida que se asciende, la flora cambia
Las
900 hectáreas del área natural protegen 18 kilómetros que ascienden desde los
650 hasta los 1750 metros de altura sobre el nivel del mar. Debido a las
condiciones biogeográficas, a medida que se incrementa la altitud, se puede
percibir la disminución de la biodiversidad.
La
directora de Flora, Fauna Silvestre y Suelos, Liliana Fortini, dijo: “la
Reserva es un espacio creado en la década del 40’ para la protección del
paisaje de Yungas. Conecta distintos sistemas ecológicos como el área protegida
La Angostura, donde se protegen aves migratorias que nidifican en la zona.
También con el cerro Nuñorco y el área protegida La Florida. Son 900 hectáreas
que incluye territorios a ambos lados de la Ruta 307”.
La densidad de la selva posibilitó su conservación
Dentro
de la Reserva se destacan tres ambientes de Yungas. La selva pedemontana
presente entre los 400 y 700 metros de altura, es la de menor estado de
conservación debido a la intervención de la actividad humana. La selva montana,
entre los 900 y 1400 metros de altura, con especies características como
el laurel y por último, el bosque montano, entre los 1500 y 2600 metros
de altura. Las laderas y quebradas abruptas dificultan la caminata hacia el
interior de la Reserva, característica que ha permitido mantener la naturaleza
en un muy buen estado de conservación.
·
El
área es de suma importancia para la preservación de fauna.
·
Fueron
registradas más de 62 especies de mamíferos.
·
15
especies de anfibios y 115 especies de aves.
Además,
forma parte de dos rutas migratorias: altoandina y panamericana central. Hay
varios sitios de interés turístico donde es posible detenerse a admirar la
naturaleza o el río que acompaña todo el camino.
Fortini
pidió que los visitantes no arrojen residuos en la vera del camino y que se
lleven la basura a sus hogares: “para el operativo se afectaron 30 personas
totalmente equipadas con protección de higiene y seguridad. Durante el
recorrido observamos con tristeza la cantidad de desperdicios que los
visitantes dejan. No colaboran con la protección del hábitat”.
Formación de técnicos con visión ambientalista
Ingenieros
agrónomos, biotecnólogos, geógrafos, biólogos, zootecnistas, entre otros
profesionales de ciencias afines, además de estudiantes universitarios fueron
parte de la actividad que graficó el fuerte compromiso de los técnicos de las
áreas dependientes del Ministerio de la Producción que trabajaron a destajo
durante todo el año, en plena pandemia y, fundamentalmente, en plena temporada
de verano.
Entre
ellos, se encontraba Belén Robles Ávalos, estudiante de Medicina Veterinaria de
la UNT y pasante en la Dirección de Ganadería, que opinó: “Me gustó mucho la
iniciativa del Ministerio. Creo que estas actividades nos forman como personas
y es parte de la capacitación que recibimos tanto en la Universidad como en
esta experiencia laboral. Disfruto de ayudar en todo lo que haga falta. Es muy
lindo que la Facultad de Agronomía y Zootecnia ofrezca estas pasantías con la
Dirección de Ganadería. Sirve para mi crecimiento personal y formación
profesional”.
La
joven explicó que le gustaría “que los ciudadanos sean más conscientes en
cuanto al cuidado de nuestra provincia y sus bellezas naturales”.
Augusto
Gutiérrez, técnico en Sistemas de Información Geográfica de la Oficina de
Cartografías y de la Dirección de Flora, Fauna Silvestre y Suelos y piloto de
aviones no tripulados certificado por la Administración de Aviación Civil de la
República Argentina, opinó: “la idea es tratar de mantener limpia una de las
áreas protegidas que tiene a cargo la Dirección. Es una zona donde se observa
un fuerte impacto antrópico, es decir, de la actividad humana. Recibe mayor cantidad
de afluencia de público. No sólo turistas, sino también pobladores de la zona”.
En
otro momento del operativo, durante un relevamiento realizado la zona de La
Angostura, donde se sembraron retoños de algarrobo, Gutiérrez operó un drone
multirotor perteneciente a Desarrollo Productivo con el fin de registrar una
panorámica del área y geoposicionar indicadores ambientales de la zona.