El PE intervino y se levantó el paro en el Ingenio Bella Vista.
Tras una reunión convocada ayer en Casa de Gobierno por el ministro de Gobierno y Justicia, Regino Amado, en el marco del conflicto entre los trabajadores del Ingenio Bella Vista y la empresa, los empleados decidieron levantar la medida de fuerza que llevaban adelante desde la semana pasada.
La mesa de dialogo fue presidida por Amado y además participaron el intendente de Bella Vista, Sebastián Salazar; representantes de la Federación Obrera Tucumana de la Industria del Azúcar (FOTIA), la Federación de Empleados de la Industria Azucarera (FEIA), y el administrador del ingenio Carlos Rojas; y el legislador Luis Espeche.
“El Gobernador nos ha pedido que intervengamos en el conflicto, llamamos a las partes y pudimos dialogar sobre la situación. Desde el Gobierno de la provincia sabemos que la relación público-privado redunda en el beneficio de los trabajadores. Vamos a acompañar para que esta situación pueda resolverse, siempre preservando las fuente de trabajo”, dijo el ministro.
En la reunión, las partes firmaron un acta donde la empresa se comprometió al pago del 50% del salario correspondiente al mes de julio hasta el próximo 3 de septiembre. Y la presentación de un cronograma sobre el abono de los haberes vencidos.
Cerca de las 15.30, las propuestas fueron analizadas en asamblea entre los representantes gremiales y trabajadores quienes aceptaron lo propuesto y el viernes, en una nueva reunión, continuarán con las negociaciones.
Con el levantamiento de la medida de fuerza, los trabajadores retomarían las actividades dando inicio a la molienda.
Al finalizar el encuentro en Casa de Gobierno, el intendente había manifestado: “Estamos buscando un punto de encuentro en el reclamo legítimo que tienen los empleados. Ponemos lo mejor desde el Estado provincial y municipal para tratar que las partes lleguen a un acuerdo”, agregó.
En tanto, José Leguizamón, representante de los empleados del ingenio, había indicado antes de la asamblea: “Buscamos soluciones. Sabemos que el Ejecutivo está preocupado pero es la empresa la que tiene que dar respuesta y destrabar el conflicto”.
Actualmente en la fábrica trabajan 500 personas.